La gran fortuna que le puede costar a PSG el capricho de Mbappé, Neymar y Messi

París Saint Germain (PSG), así como alguno de sus jugadores, en particular el argentino Lionel Messi, son objeto de críticas por abusar del uso del avión, en un momento en que, en plena crisis energética, se reactivó en Francia el debate sobre el costo ecológico de ese medio de transporte.

El director de la división de larga distancia de la compañía ferroviaria francesa SNCF, Alain Krakovitch, es uno de los protagonistas de esta ofensiva con un mensaje en su cuenta de Twitter, en el que señaló el hecho de que el PSG hiciera en avión el desplazamiento a Nantes para jugar su partido de liga del sábado 3 de septiembre.

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Krakovitch hizo notar en el mensaje que hay trenes de alta velocidad de la Sociedad Nacional de Ferrocarriles (SNCF) que cubren el trayecto París-Nantes en dos horas. Aprovechó para renovar la propuesta que había hecho su empresa al club de la capital francesa “adaptada a sus necesidades específicas” en términos de “seguridad, rapidez, servicios y eco-movilidad” para cubrir sus trayectos en tren.

El directivo de la compañía ferroviaria contrapuso esa oferta a un video grabado por alguno de los jugadores del PSG en el que se ve a Neymar y Marquinhos en el avión que los llevó a Nantes, una ciudad que está a menos de 400 kilómetros de París. La ministra francesa de Deportes, Amélie Oudéa-Castéra, dio su apoyo a la propuesta de la SNCF para transportar a los equipos de futbol en sus desplazamientos por Francia y puso un ejemplo español para justificarlo.

En concreto, se refirió, en declaraciones a la emisora France Info, a “la colaboración que existe entre el Real Betis y Renfe” con la que el equipo sevillano obtuvo tarifas preferentes para los jugadores, el equipo técnico y los dirigentes en sus viajes en tren por España para disputar partidos. La ministra insistió en que hay que cambiar algunas cosas para reducir la huella de carbono en la actividad deportiva. Previamente fue la ONG antiglobalización Attac la que cargó contra Messi dentro de una campaña en las redes sociales contra los vuelos privados.

Bajo el título “Los ultra-ricos destruyen el planeta”, Attac hizo notar que “de junio a agosto, Lionel Messi realizó 52 vuelos con su avión privado; es decir, 1.502 toneladas de CO2 (dióxido de carbono). Es tanto como un francés en 150 años”. La ONG se quejó de que, pese a todo, para la ministra de la Transición Energética, Agnès Pannier-Runacher, los que quieren restringir el uso de los aviones privados se equivocan.

Fue precisamente su colega, el ministro de Transportes, Clément Beaune, el que contribuyó a relanzar el debate sobre esos vuelos privados, a mediados de agosto, al indicar que estudiaba algún tipo de regulación y que lo más conveniente y lo más eficiente sería que eso se consensuara a nivel europeo.