Por Tomás Valle
Barcelona vive un presente confuso, muy bueno desde lo deportivo, como hacía mucho tiempo no le ocurría y muy desesperante desde lo económico, con una deuda monstruosa de alrededor de 1000 millones de euros, de los cuales 700 millones son para abonar a corto plazo. Una situación desesperante.
Segundo en La Liga de España, a tan solo cuatro puntos del puntero Atlético Madrid y clasificado a la final de la Copa del Rey, luego de una remontada histórica frente al Sevilla, en un partido que tuvo como gran figura a Lionel Messi.
Justamente el argentino es al jugador que el nuevo presidente de la institución intenta convencer de continuar en el club. El argentino tiene decidido abandonar el Blaugrana al final de la temporada y es algo que desde el Culé intentan evitar a toda costa.
Es por ello que Joan Laporta se encuentra en la búsqueda de refuerzos para rodear al capitán del equipo. La idea sería juntarlo con varias figuras de jerarquía, que le garanticen la posibilidad de luchar seriamente por la UEFA Champions League, el deseo máximo del argentino para el final de su carrera.
Pero para poder conseguirlo necesita vender varios futbolistas, caso contrario no dispondrá del dinero suficiente para poder hacer frente a semejante inversión. Es por esa razón que tiene pensado deshacerse de cuatro futbolistas muy importantes y que significaron un gran gasto de dinero en su momento.
El primero que tiene el cartel de venta es Antoine Griezmann, el francés fue uno de los refuerzos mas caros en la historia de Barcelona y nunca pudo demostrar lo que realmente se esperaba de él. Casi olvidándose de todo lo bueno que supo hacer en el Atlético Madrid.
Además, tiene una relación tirante con el capitán del equipo, el jugador que intentan convencer de continuar en el club. Otro ingrediente extra para ser considerado como prescindible, algo que al delantero no le gusta nada, por lo que no vería con malos ojos una salida de un lugar donde no lo quieren.
El único inconveniente que habría sería el económico, ya que desde el conjunto catalán esperan conseguir cerca de 80 millones de euros por su traspaso, una cifra altísima para el momento que vive el fútbol, sumado a que el rendimiento del atacante no es el mejor. Por lo que deberían conformarse con bastante menos dinero.
Otro de los apuntados a ser vendido es Ousmane Dembélé, a pesar del buen momento personal que vive, no alcanzaría para convencer a los nuevos directivos de continuar en la institución. El francés fue una de las compras mas caras que realizó y recién varios años después comenzó a rendir frutos.
El extremo no tendría muchas intenciones de abandonar la institución y Laporta no estaría desesperado por venderlo, pero ante una buena oferta que llegue por él no dudarán en hacer dinero. Laporta pretendería cerca de 90 millones de euros para dejarlo ir, por menos que eso seguramente se quede en el Culé, ya que se ha convertido en uno de los socios preferidos de Lionel Messi.
Caso muy distinto al de Philippe Coutinho, quien prácticamente no tiene minutos en el equipo y espera a que llegue el mercado de transferencias para obtener una salida definitiva del club. El brasilero nunca pudo rendir como se esperaba y ha perdido toda oportunidad con Ronald Koeman al mando del plantel.
Además, si sigue en el club y tiene minutos de juego el Barca deberá abonar una suma millonaria al Liverpool como bonus por ese motivo. Todos motivos para hacer de la salida del jugador de la Selección de Brasil una obviedad, por el cual pedirían cerca de 60 millones de euros, bastante menos de los mas de 100 millones que pagaron por él.
Por último, Samuel Umtiti, quien llegó como un refuerzo estelar para la defensa hace algunos años, también tiene el cartel de venta en su espalda. Las lesiones sufridas en el último tiempo no le permiten tener continuidad, además de que su nivel ha ido en declive luego del Mundial de Rusia 2018.
La idea de Laporta sería obtener cerca de 30 millones de euros por su traspaso, una suma que serviría para ir en búsqueda de un lateral izquierdo, que le permita a Jordi Alba tener competencia en su puesto, algo que hoy en día no ocurre.
Sin dudas, cuatro nombres muy importantes en los últimos años del club, quienes se irían para poder lograr la renovación profunda que planea el nuevo presidente, y de esa manera convencer a Messi de que continúe en el club que lo vio nacer futbolísticamente y termine su carrera allí.
22/12/2024
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