La afición del Barcelona no lo puede ni ver y por su culpa no le ganaron a Espanyol

Barcelona tropezó en su retorno a La Liga tras el parón por el Mundial de Qatar 2022. El conjunto culé recibía nada más y nada menos que a un Espanyol en zona de descenso en una nueva edición del derbi de Catalunya. Aunque empezó ganando, finalmente fue 1-1 y el Barça ya no es más único líder de la tabla.

Ahora bien, para explicar el resultado es imposible no mencionar a una persona a la que los culés ya no pueden ni ver: Antonio Mateu Lahoz. El colegiado fue uno de los grandes responsables de que Barcelona haya dejado puntos en el camino con sus decisiones que incidieron directamente en el marcador.

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En primer lugar sancionó un penalti inexistente de Marcos Alonso sobre Joselu que el propio delantero periquito lo cambió por el gol del empate definitivo. Pero es que no quedó ahí: a los 76 expulsó a Jordi Alba por doble amarilla luego de una protesta medida del defensor, y cuatro minutos después le mostró la roja a Vinicius Souza por un supuesto pisotón a Robert Lewandowski.

Venía de un Mundial polémico

Mateu Lahoz ya estaba en el ojo de la tormenta por su arbitraje en Argentina vs. Países Bajos. Aquel día dirigió los cuartos de final de la Copa del Mundo y tanto argentinos como neerlandeses terminaron enojados con el español. Esa actuación le costó no poder arbitrar ni las semifinales ni la final de Qatar 2022.