Por Damian Rodriguez
Pocas veces se verán partidos como el de hoy, aunque si uno de los equipos que lo juegan es el Real Madrid podemos decir que es rutina de lo extraordinario. Una verdadera muestra de carácter es lo que demostró hoy el equipo dirigido por Carlo Ancelotti dando vuelta un encuentro que parecía imposible de ganar. Sin embargo, nuevamente el conjunto grande golpeó cuando debía y se llevó el tan anciado premio.
Hoy Real Madrid ha jugado un partido de Champions League, de esos a los que estamos acostumbrados a ver cuándo da vuelta un resultado adverso cómo aquel partido increíble contra el París Saint Germain de Messi, Mbappé y Neymar. En esta oportunidad tocó hacerlo contra un rival siempre difícil como lo es el Villarreal.
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Si bien la nave insignia de este Madrid, el último balón de oro, Karim Benzema, no marcó gol en este partido, si lo hicieron los que no estamos acostumbrados a ver, cómo Ceballos y Militao, aunque como siempre, si no aparece uno, lo hace el otro, en esta ocasión fue Vinicius el encargado de anotar el otro tanto.
El Submarino Amarillo había arrancado con todas las fuerzas y en un primer tiempo espectacular le ganaba 2-0 al Real Madrid, pero los cambios y el mal ojo de Quique Setién para ver el partido, fue un condicionante para este 2-3 trágico, que terminó con el sueño de salir campeones nuevamente. La gran pregunta después de este partido ¿Es un resultado saca técnico?
21/12/2024
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