Por Damian Rodriguez
En el seno del Real Madrid, comienza a cernirse la comprensión de que el anhelado fichaje de Kylian Mbappé se torna cada vez más desafiante. A pesar de múltiples oportunidades en las que el jugador ha coqueteado con la idea de vestir la blanca, ha optado por quedarse en el Parque de los Príncipes, incluso ante incertidumbres sobre el proyecto merengue.
Paralelamente, desde Arabia, emerge un nuevo rival inesperado para el conjunto madrileño, encarnado en el Al-Hilal, que ha llevado a Neymar JR y ahora se erige como adversario en la carrera por Victor Osimhen, uno de los delanteros más aclamados en la élite europea.
La reciente disputa entre el nigeriano y su club actual, el Nápoles, ha reactivado el interés de varios equipos, entre ellos el coloso saudí. Se rumorea que el Al-Hilal está planeando una ofensiva financiera que supera los 200 millones de libras para asegurar a Osimhen en 2024, una oferta que el Real Madrid difícilmente podría igualar si la posibilidad de Mbappé se desvanece por completo.
Esta amenaza desde Arabia Saudita se torna significativa para Madrid, dado que la negativa final de Mbappé implicaría su desaparición de la agenda del presidente Florentino Pérez para siempre. Además, el equipo enfrenta preocupantes problemas ofensivos en esta temporada, con el poco peso de Joselu y la necesidad de un delantero de renombre que pueda rivalizar con figuras como Erling Haaland, Robert Lewandowski, Harry Kane o el mismo Kylian Mbappé.
En este contexto, Victor Osimhen, aprovechando también su situación complicada en Nápoles, emerge como una prioridad para fortalecer la parcela ofensiva del Real Madrid a partir de la próxima temporada, con el anhelo de reforzar su candidatura para conquistar la Champions League, una empresa que se avizora sumamente retadora en la presente campaña.
22/12/2024
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