Por Tomás Valle
La Selección de España volvía a disputar su primer partido luego de la dura eliminación contra Marruecos en los octavos de final de la Copa del Mundo. No siempre es sencillo agarrar un grupo que viene de semejante golpe en un torneo tan prestigioso en este deporte. Sin embargo, Luis De La Fuente se hizo cargo con todas las expectativas.
El entrenador realizó varias modificaciones en relación a lo que había hecho Luis Enrique durante su proceso. Lo primero que hizo fue convocar a jugadores que no tenían su lugar y habían hecho grandes merecimientos para ser convocados. Entre ellos los regresos de Iago Aspas, Dani Ceballos y Nacho de los más destacados.
Otra decisión que tomó fue la capitanía. El riojano optó por darle la cinta a aquel que tenga más experiencia entre los convocados, así fue cómo Álvaro Morata fue el encargado de portar el brazalete del líder. Además, le dio la titularidad, ya que Luis Enrique no lo usaba como una pieza habitual en el primer equipo.
Para el duelo contra Noruega, su primer partido dirigiendo al combinado español, De La Fuente alineó a Iago Aspas, uno de los jugadores que más se le recriminaba al ex entrenador del Barcelona. De La Fuente cambió esa postura que tenía con los centrodelanteros su antecesor. Rápidamente, La Roja se puso en ventaja con un buen gol de Dani Olmo que comenzó con la creación de Morata.
Antes de que se juegue el primer cuarto de hora, España ya estaba arriba en el marcador. El delantero del Colchonero aguantó un pase que recibió dentro del área, giró y abrió la jugada para Balde. El lateral mandó un centro arco el cual desvió con un taco Dani Olmo. De La Fuente siguió con mucha tensión la jugada. Cuando la pelota pasó la línea final levantó sus brazos y gritó con euforia el 1-0 parcial frente a los noruegos.
22/12/2024
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