Jugó en el Barça, fue galáctico del Madrid y ahora vive un pésimo momento

El ex futbolista brasileño  que jugó en el Real Madrid y el FC Barcelona, tras dejar su carrera como jugador como consecuencia de sus graves lesiones, tuvo que reagruparse y utilizar su talento de una manera distinta. Fue adquiriendo acciones en diversos clubes. Primero en el Real Valladolid y luego en el Cruzeiro de Brasil, club en el que debuto profesionalmente, también con el objetivo de devolverle a primera división. 

El club brasileño del que Ronaldo Nazario es socio mayoritario atraviesa un momento muy delicado, que ha hecho que 'O fenômeno' tenga que salir a pedir ayuda públicamente: “Este es un momento delicado. Nadie esperaba un momento tan difícil. Sabíamos que nos enfrentaríamos a fluctuaciones, que sería muy difícil después de pasar de la Serie B a la Serie A, con un presupuesto no tan competitivo como el de otros equipos”.

Por eso ha hecho un pedido especial a la afición: “Pido nuevamente este crédito a la afición de Cruzeiro. Si no lo hacen por mí o por mi gestión, que lo hagan por Cruzeiro, por su historia, y apoyen a los jugadores desde el principio hasta el final del partido, porque sólo así saldremos de esta situación”. Ronaldo Nazario, uno de los propietarios, ha puesto la cara ante la afición y está intentando calmar las aguas. 

Los aficionados abuchean a los jugadores y han dirigido sus dardos especialmente hacia Rafal Cabral el portero. Ronaldo Nazario se ha expresado sobre esto: Eligió la afición a Rafael para que fuera el gran villano de la historia. Los aficionados ya no quieren entender el momento que vivimos, de dónde venimos. Venimos de la Serie B, un presupuesto limitado, una deuda de mil millones de dólares". Como ex futbolista Ronaldo sabe lo que lo duelen las críticas.

Pese a la lesión que lo deja afuera 6 meses, el emotivo gesto de Neymar en Brasil

Neymar Jr. sufrió una gravísima lesión en su rodilla y estará seis meses sin jugar. El jugador sufre de una rotura de ligamento cruzado anterior y menisco. Neymar se levantó, caminó como pudo y con dificultad se agachó para cumplirle el sueño a una niña. Este gesto lo hizo con muletas y ya con la pierna inmovilizada.