Por Tomás Valle
Gerad Piqué fue uno de los grandes protagonistas del último mes en Barcelona. El mítico defensor culé anunció su retiro de manera repentina y tuvo una emotiva despedida en el Camp Nou luego del triunfo blaugrana por 2-0 sobre Almería. No obstante, su último encuentro como tal fue el pasado 8 de noviembre y todo terminó mal: no ingresó y se fue expulsado en el descanso.
De camino al vestuario, Piqué le fue a reclamar de manera desmedida a Gil Manzano por la expulsión de Robert Lewandowski y el colegio no dudó en enseñarle a él también la cartulina roja. Ocho días más tarde, el Comité de Competición publicó la insólita sanción contra Gerard: cuatro partidos de suspensión y una multa de 2.400 euros.
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La mitad del castigo no podrá cumplirla aunque quisiera por el hecho de que ya se encuentra retirado de la actividad profesional. Sin embargo, sí deberá hacerse cargo de la sanción económica. Además, el Barcelona también deberá pagar una suma de 1400 euros como “multa accesoria al club” de acuerdo al artículo 52.
"Insultos, ofensas verbales y actitudes injuriosas (99). Suspender por 4 partidos a D. Gerard Pique Bernabeu, en virtud del artículo/s 99 del Código Disciplinario, considerando que los hechos recogidos en el acta se realizan en una unidad de acción, con multa accesoria al club en cuantía de 1400,00 € y de 2400,00 € al infractor en aplicación del art. 52."
23/12/2024
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