Por Damian Rodriguez
Tener una mala actuación siempre es frustrante porque todos los jugadores quieren ganar y coronarse de un título con su equipo. A veces sucede que tenés un día brillante, te convertiste en figura del partido y estás con los ánimos bien arriba, pero en otras ocasiones tenés un encuentro para el olvido, donde querés esconderte bajo la tierra y hasta pensás en dejar todo. Pero el fútbol siempre te da revancha, sin importar el contexto.
Esto sucede mucho más precisamente en los arqueros, los principales responsables de que el arco no reciba goles. O así lo interpretan ellos, pero no es así. Al fin y al cabo, el fútbol es un deporte en equipo y no es sólo culpa de uno, sino de 11 que están en la cancha, más el entrenador o el futbolista que jugó y fue sustituido. Bueno, esos fueron los sentimientos de Loris Karius, después de su controversial actuación en la recordada final de UEFA Champions League 2018.
En aquel trascendental partido, Real Madrid venció 3 a 1 a Liverpool y toda la culpa recayó en el arquero por sus infantiles errores. Como los jugadores también son personas y no robots, el alemán casi decide retirarse. Pero, al final, no lo hizo. Estuvo a préstamo en Besiktas y Union Berlín, donde sumó minutos, hasta que regresó a los Reds y quedó relegado. Hoy, después de 728 días, Karius volvió a atajar, pero ahora con la camiseta de Newcastle.
Y que ironía. Su regreso al arco fue en una final, para no traerte malos recuerdos. En la de la Copa de la Liga Inglaterra (o Carabao Cup), donde su equipo enfrenta a Manchester United. Sin embargo, su regreso no fue el mejor porque las Urracas perdieron 2 a 0. Pero, al menos, no fue tan para el olvido como aquella ante el Merengue.
Era la final de la UEFA Champions League 2018. Real Madrid y Liverpool se enfretaron en Kiev, Ucrania. Los errores que tuvo fueron muy insólitos y más sabiendo en qué contexto lo hizo. En su primer blooper, Loris Karius tomó la pelota, se la quiso ceder a su compañero con la mano, pero aapreció un atento Karim Benzema para poner el pie y abrir la cuenta. Luego, sobre el final, Gareth Bale, quien venía de convertir un golazo de chilena, le pegó desde afuera, el balón se le escurrió de las manos y se concretó el 3 a 1 final. Para el olvido.
22/12/2024
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